Inter y Juventus han ofrecido un notable espectáculo en otra nueva edición del derbi de Italia y que ha concluido con triunfo interista merced a dos genialidades de Mauro Icardi, primero como rematador y luego como asistente.
La primera parte concluyó sin apenas oportunidades, pero con un juego tremendamente vivo y atractivo, con intensidad y ganas de agradar. La peor noticia se la llevaban los de Allegri, al tener que cambiar a Benatia por lesión antes de la media hora de juego y por acumular tres amarillas en jugadores claves.
Tras el descanso, un disparo de Candreva estuvo cerca de inaugurar el marcador, el cual variaría en esta segunda mitad, justo lo que le había faltado al primer acto. La aparición de Sandro por la izquierda fue remachada por el flanco derecho por Lichtsteiner, demostrando que el 3-5-2 también puede ser un esquema ofensivo.
