A Pep Guardiola no le hizo falta amenazar a sus jugadores con poner cruces en caso de no sacar adelante el compromiso ante el Ceuta. Por mucho que el de Santpedor recurriera a la cara B del Barça para iniciar una nueva andadura en la Copa del Rey, del compromiso y la actitud de los azulgrana nunca hay dudas.
Dos goles más de Messi, tres puntos al zurrón y cuarto triunfo consecutivo de inicio a domicilio, lo que ningún Barça había conseguido en la historia, fue lo mejor que sucedió ayer en La Romareda.
El Barça ya es líder del grupo D de la Champions tras superar, con dos nuevos goles de Messi, a un rival que regresó a Dinamarca con la cabeza muy alta. El once de Guardiola volvió a desplegar un póster condos versiones de sí mismo.
El Barça logró un triunfo que vale más de tres puntos. Superó a un Valencia que llegaba como líder y que era toda una prueba. Pero, sobre todo, dejó claro que se han acabado los regalos en el Camp Nou, que como ha pasado en los últimos años puntuar en el nuevo césped blaugrana va a ser tan difícil como antes
