Por fin puede decirse, sin ningún temor a que un mal rebote o un resbalón lo impida, que ha ganado el fútbol.

Como cada minuto transcurrido con la portería a cero jugaba a favor del Barça sólo puede calificarse de notable para arriba el empate sin goles mantenido en el marcador hasta que el dúo dinámico se puso en acción y dejó la eliminatoria sentenciada en el 42' del partido. Lo hizo con un gol de Messi que había empezado robando el balón; luego Alves removió la jugada perfectamente por la banda hasta que se la devolvió a Leo...

Dani Alves consiguió su segundo gol en la actual Champions al romper el fuera de juego controlando un pase magistral de Andrés Iniesta. Recogió el pase con el pecho y tocó lo justo para driblar al guardameta y marcar el segundo gol.

La Champions volvió a presenciar una exhibición del Barça de Guardiola. El conjunto barcelonista cumplió con creces en la primera cita de la campaña en que las circunstancias lo empujaron hasta una situación límite. Si en la ida fue increíble que el Barça no golease, ayer la historia se repitió con creces.

El Barça perdonó ante la portería de Szczesnyysedejó remontar el 0-1 de Villa en los minutos finales.

No fue un disgusto pero sí un palo este empate, el resultado que más quería evitar Guardiola de cara a dosificar esfuerzos antes del clásico. Otra vez la madera, por tres veces, impidió consumar goles de Villa, Messi y Pedro que habrían dado la victioria al Barça, el único equipo que la mereció en el ruidoso y agobiante Parken de Copenhague.

El Barça ya es líder del grupo D de la Champions tras superar, con dos nuevos goles de Messi, a un rival que regresó a Dinamarca con la cabeza muy alta. El once de Guardiola volvió a desplegar un póster condos versiones de sí mismo.

Es una pesadilla. Cosa de brujas. Quizás la fe de Kurban Berdyev en su creencias religiosas. Sea lo que sea, no hay manera de acabar con el azote del Barça de Pep Guardiola, el ultradefensivo Rubin Kazan, contra el que sólo ha ganado dos de los nueve puntos disputados en dos años.

Sólo se ha ausentado un partido. El Arte, con mayúscula, regresó al Camp Nou coincidiendo con la Champions y de la mano del mejor Barça, que atropelló a un Panathinaikos que, pese al 0-1 inicial, nunca tuvo ninguna opción frente a un coloso enchufado del minuto cero al noventa.

El Barça cerró la primera fase de la Champions saldando una vieja cuenta con el Rubin Kazan, al que no había ganado en sus tres enfrentamientos anteriores,y con un ojo puesto en los marcadores de media Europa para ir conociendo posibles rivales en octavos.